En esta lección trabajaremos el fortalecimiento y la independencia de los dedos.
Este ejercicio que comparto es del notable compositor y pedagogo húngaro Ernst Von Dohanyi (doñañi). Es fundamental y muy eficaz a la hora de nivelar la fortaleza de los dedos.
El ejercicio se enfoca en los dedos débiles: 4º y 5º en mano izquierda, y 3º y 4º en mano derecha. La clave de un buen ejercicio de técnica pianística como éste, es que mantiene algunos de los dedos oprimidos en cada mano para obtener una independencia óptima, y por otro lado trabaja con los 2 a 3 dedos restantes para crear fortalecimiento.
En esta lección se trata un aspecto clave en el estudio del piano: la posición correcta ante el teclado y el fortalecimiento de los dedos.
Lo primero, es trabajar la posición de –arco– llamada así porque la mano toma una forma similar a un arco de iglesia gótica. La idea es acentuar esta posición siempre al tocar de una manera natural, mostrando ligeramente los nudillos de los dedos. De esta manera, al interpretar se logra una disposición relajada, a la vez que fortalece la digitación de cada dedo en el teclado.
Como segundo punto se debe considerar mantener la mano perpendicular al teclado, es decir la mano se convierte, por así decirlo, en una extensión del mismo. De esta manera se evitan los molestos dolores de muñeca, del antebrazo y el túnel carpiano causados por mala postura tanto de la mano como del brazo al tocar el instrumento.
Un tercer punto, es mantener la espalda recta siempre, con los hombros abajo y sentarse en el banco del piano desde la mitad hacia adelante, siempre dejando una distancia natural entre el abdomen y el teclado al interpretar.
En esta lección se explica un ejercicio de fortalecimiento o también llamado de independencia de mano. Se trata de tomar las 5 primeras notas de una escala mayor, oprimir las teclas en su orden respectivo con cada uno de los dedos y trabajar cada dedo 8 veces en articulación staccato.
Para mejor aprovechamiento de este ejercicio, las dos manos van a estar a dos octavas de distancia, naturalmente dispuestas sobre el teclado, y con las ideas anteriormente expuestas: posición de arco, espalda recta y relajada, hombros abajo y mano perpendicular al teclado.
El siguiente diagrama está basado en el modelo teórico del diálogo didáctico mediado. Este lo he configurado en cuatro circunferencias mediante las que quiero significar los componentes principales, las diferentes tipologías de diálogo que se presentan en la educación a distancia, a la vez que las grandes etapas que ha supuestos la incorporación progresiva de los diferentes recursos educativos a esta modalidad. Igualmente en el gráfico he pretendido reflejar los flujos de comunicación y los procesos que se pueden implementar en un sistema de educación a distancia.
Se destacan en el gráfico los cuatro componentes esenciales en todo programa a distancia: docencia (institución), aprendizaje (alumnos), materiales (contenidos) y comunicación (vías y canales). Y entre esos cuatro componentes, ubico el diálogo al que en este caso le doy el calificativo de didáctico con el fin de enfatizar el objeto del mismo, al igual que mediado por entender que sólo en situaciones excepcionales este diálogo llega a ser directo y presencial.